(El que merodea en la lluvia / Los ojos del Diablo)
Hugo Correa
356 páginas
Alfaguara
ISBN 9789569583445
Luego que un satélite ruso colisionara cerca del villorrio de El Guindo, extraños sucesos -entre los que se incluyen la muerte de dos pobladores- tienen lugar, y una presencia desata el terror entre los habitantes, en «El que merodea en la lluvia». En «Los ojos del Diablo», en tanto, el joven heredero de una vasta propiedad busca entender el anómalo comportamiento de sus padres y cómo este se vincula con la leyenda de que el origen de su fortuna proviene de un pacto con el Maligno.
Hugo Correa es un referente de la ciencia ficción en Chile. Por lo tanto, yo tenía muchas ganas de leer su obra. Primero comencé con su novela póstuma El valle de Luzbel, la cual me gustó mucho, sin por eso convertirse en mi favorita. Seguía esperando más de Hugo Correa y luego, cayó en mis manos Dos novelas, una compilación de dos novelas cortas.
La primera es El que merodea en la lluvia. Trata sobre Salvador, un joven de origen humilde y que conoce por casualidades de la vida a Celinda, una chica de clase acomodada. Se enamora de ella pero para Celinda, Salvador es uno más de su larga lista de pretendientes. La chica invita a Salvador, junto a otro de sus pretendientes, a que la acompañen a visitar a su tío Carlos al campo. Los acompañan el hermano de Celinda, Juan. En la localidad, circulan extrañas historias vinculadas a la caída del Luna VII, que fuera el primer cohete en alunizar por control remoto y que sufrió un accidente mientras descendía a la Tierra. Los lugareños asocian los acontecimientos al Merodeador, un ente satánico. Pero pronto, las conjeturas de Salvador lo llevan a pensar que el mal que los acecha no es de este mundo.
Esta historia es bastante bleh, excepto por las últimas veinte páginas, que mejoran mucho la historia. Me molestó mucho el tono machista que se usó para hablar de las mujeres presentes en la obra, sobretodo de Celinda, aunque entiendo que igual esto tiene sus años y ese pensamiento era más habitual. No sé si se podría calificar de ciencia ficción, para mí es más terror psicológico, con matices científicos. Por momentos, me recordó al clásico El color que cayó del cielo de Lovecraft.
La segunda historia es Los ojos del Diablo, donde Cristian, un joven adinerado, suele viajar hacia la casa familiar en el sur del país, en el campo. Él se siente muy cómodo allí y mientras realiza su viaje, divaga rememorando a su familia y las cosas que han vivido en el fundo. Lo cuál a lo largo de la narración lo entendemos mejor, ya que existe entre los lugareños la leyenda de que el bisabuelo de Cristian realizó un pacto con el diablo, pacto que se extendería hasta el padre de Cristian y con el que éste se obsesiona por saber los detalles. La novela da muchas vueltas y no logré encontrar los componentes que podrían calificarla de ciencia ficción. Aunque el comienzo es entretenido, siento que la novela se va desinflando poco a poco y el final me pareció un poco decepcionante.
Ambas novelas cuentan con la característica narración de Hugo Correa, lenta, llena de detalles y vocabulario rebuscado. Aunque creo que no son sus mejores historias, el autor logra que uno enganche con lo que él desea contarte, aunque los resultados no sean los que uno espera. También, como les comentaba antes, no considero este libro de ciencia ficción, si no de terror. Incluso podría aventurarme y hablar de literatura costumbrista, debido a los escenarios donde desarrolla las historias y los personajes que aparecen en ellas.
Creo que voy a seguir intentando con sus otras novelas, especialmente Los Altísimos, que es su novela más destacada y de la que sí he oído muy buenas críticas.
