Autor: Lauren DeStefano
Editorial: Puck
ISBN: 9788496886285
Con ayuda de Gabriel, Rhine ha logrado escapar de la mansión y del terrible destino que la aguardaba en Efímera. Pero en el exterior se encuentran con un mundo incluso más aterrador que el que dejaron atrás.
Entre los peligros que los aguardan, caen en un burdel dirigido por una cruel y demente tirana. Una vez más, Rhine debe hacerse pasar por una chica dócil mientras planea su escape. Los dos están decididos a llegar a Manhattan, donde tal vez puedan encontrar la paz viviendo con Rowan, el hermano mellizo de Rhine. Pero el camino es largo y peligroso, y además deben eludir los intentos de Vaughn, el suegro de Rhine, de regresarla a la mansión cueste lo que cueste. Y en un mundo donde las mujeres viven hasta los veinte años y los hombres hasta los veinticinco, el tiempo vale mucho más que el oro.
Acá volvemos al punto en que nos quedamos en Efímera, Rhine escapando con Gabriel en busca de Rowan. Pero las ganas de escapar de Rhine solo se reducen a eso: ganas. No hay planes ni recursos, por lo que a poco andar, los chicos caen en manos de Madame Soleski, la regenta de un burdel. Ahí pasan por penurias, como formar parte de una exhibición perversa y aunque se salvan por muy poco (al menos Rhine, ya que Gabriel es sometido bajo drogas), logran escapar gracias a Lila, una de las chicas que trabajaba allí, a cambio de que se llevaran a su hija Loquilla.
El resto del libro es sobre el viaje que estos tres personajes realizan para escapar de Vaughn y cuando por fin llegan al sitio que Rin tanto a añorado, descubre que su hermano ha desaparecido y de que no queda casi nada de la que fuera la casa de sus padres. ¿Qué esperanza queda para Rhine?
El libro continua un poco más hasta que Rhine es capturada nuevamente por su suegro, pero no es nada demasiado relevante. Este libro es claramente un puente en la historia, no trae grandes revelaciones aunque cuenta con personajes que volveremos a encontrar y que podrían (o no) ser relevantes más adelante. La autora intenta meternos con calzador el "amor" entre Rin y Gabriel y bleh, no resulta. ¿Por qué? Porque se nota que no tienen química, es más, se potencia eso que les comentaba en la anterior reseña, lo de que se quieren como amigos, por una pura necesidad de contar con alguien en una situación desesperada.
Al final, Vaughn la captura y Rhine vuelve a ser prisionera en la mansión, solo que ahora estará en el tétrico sótano y será Cecilia la que, nuevamente, irá en su ayuda, dejándonos con las ganas de saber que sucederá con Rhine y si ella y su esposa hermana podrán escapar de las garras de su suegro.
Este libro decae un poco con respecto al libro anterior, pero se entiende al ser un libro puente. Siento que la protagonista se encuentra estancada y que, al contrario, Cecilia es casi el único personaje que ha tenido ese crecimiento que yo esperaría en su situación. De todas formas, quiero ver que le deparará el futuro a las chicas y si Linden, por fin, saldrá y aceptará la verdad sobre su padre.
